Hace un tiempo pensando en cosas varias mientras caminaba por la calle y recordaba los manuales de DnD que tengo, me acordé del de "Puño y Espada" y con él, de la descripción de un combate que hacen dentro y que me parece muy divertida. Luego me puse a pensar quien ganaría entre X y Y monstruo del manual de cuarta edición, y así nació este intento que hacemos ahora ^^ La idea es semanalmente los martes enfrentar a 2 monstruos del manual de monstruos 1 de D&D 4a edición para ver qué sucede y como se desenvuelven las cosas en un caso que se omite en el mundo de D&D (procuraré no usar duelos entre PNJs y monstruos, pero de pronto algún día surgirá una)
En fin, ojalá les guste y si no, me comentan. Los combates no me los invento, yo roleo el combate con dados y tales mientras escribo.
Si esto ya se hace o ya existe, que mal, igual lo voy a hacer xD

Pdta: Por el bien de mi salud mental, los nombres de los monstruos van a estar en inglés porque mi manual es la versión en inglés.
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Encuentro 1:

-¡Marben! Tus días de culto a Bane han llegado a su fin. Es hora de que pagues por todo lo que has hecho en su nombre. -dijo el ángel tan pronto llegó a la entrada de la guarida de su objetivo.
-¿Los dioses piensan que soy estúpido o qué? -grita Marben, el hobgoblin- ¡La palabra de Bane reinará sobre la tierra y ningún ser podrá detenerlo!
Dicho esto, Marben se arroja hacia el ángel agitando su mangual doble. El ángel lo esquiva y levanta su brazo derecho en el cual sostiene una espada larga hecha de fuego. Marben se detiene y se gira a mirar al ángel, pero éste actúa demasiado rápido y le asesta un golpe con su espada en el pecho al hobgoblin.
-¡Te maldigo! ¡Bane te hará pagar por todo esto, y yo también!
Marben gira rápidamente su mangual y alcanza al ángel en el brazo, haciendo que este retroceda, acción que aprovecha para girar el mangual de nuevo y golpearle el brazo nuevamente, dejándole una marca negra en el lugar en el que recibió el segundo golpe.El ángel retrocede y desenfunda con su mano libre una daga media. Alejando el dolor que le produce su brazo derecho, se lanza de nuevo contra su oponente esta vez intentando alcanzarlo con la daga. Marben se gira, pero la daga alcanza a rozar su muslo, por lo que éste cae al suelo, situación que el ángel aprovecha para asestar un segundo golpe en su espalda con la espada larga.
Marben gira por el suelo quedando a casi 5 pies del lugar donde cayó y se levanta enfurecido. Gira su mangual por encima de su cabeza mientras camina lentamente hacia su contrincante. El ángel se lanza con la espada a golpear a Marben pero este rápidamente baja ambas puntas del mangual, el ángel se da cuenta de su estrategia a tiempo y alcanza a esquivarlas con un suave movimiento hacia atrás. De repente el ángel levanta la cabeza y los brazos hacia el firmamento, acción tras la cual comienzan a caer varios rayos a su alrededor golpeando de lleno con varios de ellos a Marben que queda aturdido por unos segundos. Aún así, Marben agita débilmente su mangual intentando golpear a su enemigo, pero éste ni siquiera tiene que esforzase mucho para evitarlo. Aprovechando la desorientación de su rival, el ángel lo golpea con ambas armas a la vez en el lado derecho del cuerpo, empujándolo fuertemente hacia el lado contrario. Marben reacciona y golpea con ambas puntas al ángel, que al no esperar tal reacción del hobgoblin, recibe el golpe en su pierna izquierda, cayendo al suelo para ser recibido por otro golpe en la cabeza, lo que hace que el ángel comience a destilar un humo rojizo que al separarse cierta distancia del ángel cae al suelo en forma de grandes gotas de sangre.
-Supongo que no te vas a rendir fácilmente... ¡ahora sufrirás el castigo de Bahamut por todos las atrocidades que has hecho!
El ángel se levanta del suelo ahora cubierto con su propia sangre con una furia evidente en su rostro. El fuego de su espada se incrementa así como el que le rodea la cabeza y gran parte de su cuerpo. El ángel golpea a Marben, primero con la daga y luego con la espada, y los golpes dejan marcas de fuego en la piel del hobgoblin. El ángel se elevan en el aire y retrocede cautelosamente, pues ahora sabe que no le puede dar ninguna clase de ventaja a su oponente. El suelo tiene cada vez más y más sangre. Marben algo sorprendido, intenta golpear al enemigo, pero éste se mueve rápidamente esquivando a Marben y su ataque. El ángel se eleva en el aire por encima de Marben y desciende rápidamente con la espada larga hacia abajo, preparado para golpear al hobgoblin con todas sus fuerzas. Momentos antes de asestar el golpe, Marben se mueve hacia un lado, pero el ángel, previendo el movimiento de su objetivo, abre la daga hacia la nueva posición de Marben golpeándolo con ésta y luego con la espada, ahora en llamas aún mas ardientes. El casco del hobgoblin arde en llamas y éste se lo quita y lo arroja hacia un lado, volviéndose polvo herrumbroso al caer al suelo. Marben yace en el suelo con múltiples cortes en el rostro y los brazos, marcas de quemaduras y un ojo completamente inhabilitado.
-¡La ira de Bane caerá sobre ti, estúpido lacayo del dios dragón! - grita Marben, mientras se levanta del suelo y comienza a girar su mangual a un lado. Intenta golpear al ángel rápidamente, pero el movimiento del arma es demasiado rápido y varios golpes de fuego han alcanzado al arma, lo que hace que uno de los dos extremos del mangual se desprenda y salga despedido lejos de ambos contrincantes.
El ángel arremete una vez más. Golpea a Marben con la daga en el pecho y entierra la espada de fuego en la herida abierta antes. Marben lanza un grito de dolor y la herida de su pecho se agranda considerablemente. Cuando el ángel retira ambas armas, el hobgoblin queda postrado de rodillas en el suelo, mientras escupe sangre por la boca y de su herida se escapa el vital líquido.
-¿Estás dispuesto a rendirte ahora? -pregunta el ángel, mientras mira de lejos a Marben- Podría hacer tu agonía mucho más corta asesinándote rápidamente.
-¡Nunca! -exclama el hobgoblin, que se reincorpora con su vestimenta bañada en sangre- ¡Acabaré contigo y con todos los estúpidos ángeles que se atrevan a enfrentarse a mi poder!
Acto seguido el hobgoblin trota hasta dónde está el ángel que lo ataca con su espada, pero el hobgoblin se agacha a tiempo y le asesta un golpe con su mangual en el pecho. El ángel se agacha un poco pero sin vacilar un segundo golpea a su adversario con la espada, lo que lo tumba de espaldas al suelo una vez más. El ángel remata a su enemigo en el suelo con la daga que ahora despide llamas desde su hoja. Clavándole la daga en el cuello a su enemigo, el ángel se levanta y lo mira.
-No fue fácil, pero la voluntad del dragón de platino se ha cumplido. Ha terminado tu tiempo en este lugar, Marben. Tú caíste y ese Dios al que decías servir también caerá. La justicia reinará en Lackertown.

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Saludos y buena caza.